
Con toda seguridad, ninguno de los demás pitufos es tan guapo como el Pitufo Vanidoso, pues solamente él lleva una flor en el gorro, y para no olvidar nunca lo guapo que es, se mira constántemente en su pequeño espejo de mano. Pequeño Pitufo Vanidoso, ¡tú si que eres guapo!
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